Guido Sandleris sobre los desafíos de Argentina y el camino hacia la estabilidad económica y el crecimiento
El 13 de abril, el Georgetown Americas Institute (GAI) organizó una conversación con Guido Sandleris para discutir su análisis de los desafíos económicos de Argentina y un posible camino a seguir para que el país logre un crecimiento económico estable e inclusivo.

Los desafíos económicos de Argentina en los últimos años se han vuelto cada vez más complejos a medida que las crisis emergentes y las opciones de políticas intervencionistas crearon un entorno macroeconómico cada vez más inestable. En ese contexto, la peor sequía en un siglo ha debilitado aún más la economía, mientras el gobierno vuelve a negociar con el Fondo Monetario Internacional (FMI) para reestructurar el programa del FMI del país. Para reflexionar sobre estos desarrollos y sobre un posible camino a seguir para el país, GAI organizó una conversación con Guido Sandleris, quien se desempeñó como gobernador del Banco Central de Argentina de 2018 a 2019. También es profesor invitado de economía internacional en SAIS Europa y profesor de economía en la Universidad Torcuato Di Tella en Argentina.
Perspectivas de una crisis prolongada
“En pocas palabras, el desempeño económico de Argentina ha sido muy pobre en una región que también ha tenido un desempeño deficiente en los últimos años”. -Guido Sandleris
Como explicó Sandleris, los problemas económicos de Argentina no son una historia nueva. La historia desde 1970 ha estado marcada por un crecimiento lento, crisis recurrentes y, con frecuencia, una alta inflación. Entre 1970 y 2019, el crecimiento anual del PIB promedió 0,7%, un desempeño significativamente inferior al del resto de la región. De igual forma, en ese período el país estuvo 22 años en recesión y tuvo 39 años con inflación superior al 20%. El país solo tuvo 8 años en los que disfrutó tanto de un crecimiento positivo del PIB como de una inflación por debajo del 10%. Sandleris argumentó que la raíz de estos problemas es esencialmente fiscal, pues desde 1970 Argentina solo ha tenido 5 años con superávit presupuestario y 13 con superávit primario.
Sandleris explicó cómo el gasto primario del sector público se ha disparado desde que Néstor Kirchner asumió la presidencia en 2003. En 2002, el gasto estatal representaba el 22,4 % del PIB, pero para 2015 casi se había duplicado al 41,4 % debido a que las administraciones de Kirchner mantuvieron un déficit fiscal creciente. Los intentos posteriores de equilibrar el presupuesto bajo Mauricio Macri redujeron la participación al 36,2%, pero la pandemia y las decisiones políticas tomadas bajo la administración de Fernández desde 2020 han vuelto a aumentar el gasto. El crecimiento económico del país ha estado estancado durante más de una década. Como consecuencia, el PIB per cápita en 2023 es el mismo que en 2006.
Según Sandleris, la política económica de la actual administración puede explicarse como un alto gasto público posibilitado por un alto financiamiento monetario. Esto permite disponer de más ingresos, lo que proporciona un crecimiento de corta duración, pero también conduce a un aumento de la inflación y una mayor presión sobre el mercado de divisas. A su vez, las intervenciones del mercado para controlar los precios y los tipos de cambio dan lugar a restricciones a la importación y al congelamiento de las facturas de servicios públicos, lo que crea perturbaciones en el mercado que reducen la actividad económica y desfinancian servicios públicos como la electricidad. Sin embargo, estos desafíos macroeconómicos están subrayados por un entorno internacional en el que Argentina tiene mucho potencial de crecimiento.
Una nueva estrategia de estabilización
Argentina necesita seguir adelante con las reformas estructurales y controlar su déficit presupuestario si quiere superar estos desafíos. Sandleris defendió una nueva estrategia basada en una política fiscal agresiva y una política monetaria prudente en el frente cambiario. Esto significaría una reducción significativa del gasto público, el fin de los actuales controles de divisas tipo “Frankenstein” y el fin del financiamiento monetario del déficit fiscal. Esta estabilización corregiría los desequilibrios macroeconómicos y crearía un entorno más favorable a los negocios para el desarrollo de la riqueza natural del país.
“The good news is that Argentina has everything that the world needs right now. Agricultural surpluses, natural gas, the second largest lithium reserves, tremendous potential for copper, and a vibrant tech sector at the forefront in Latin America.” -Guido Sandleris
El evento fue moderado por el director fundador de GAI, Alejandro Werner. Una grabación completa del evento está disponible en el canal de YouTube de GAI.