Ilan Goldfajn, presidente del Banco Interamericano de Desarrollo, comparte su visión para América Latina
El 14 de febrero, el Georgetown Americas Institute (GAI) organizó una conversación con Ilan Goldfajn para discutir su visión del Banco Interamericano de Desarrollo (BID) y su evaluación de los desafíos y oportunidades económicas que enfrentan América Latina y el Caribe en la actualidad.
El año 2022 fue complicado para América Latina. El aumento de la inflación y la desaceleración del crecimiento desafiaron las perspectivas económicas de la región, mientras surgían profundos debates sobre qué papel deberían desempeñar las instituciones multilaterales en este nuevo y desafiante escenario. En ese contexto, GAI organizó una conversación con Ilan Goldfajn, quien inició su mandato de cinco años al frente del banco en diciembre de 2022, para reflexionar sobre cuáles serán sus prioridades en este entorno complejo. El director fundador de GAI, Alejandro Werner, actuó como moderador, con comentarios introductorios de la directora general de GAI, Denisse Yanovich.
Nuevas necesidades y demandas
Los ciudadanos de América Latina y el Caribe están frustrados con el statu quo y exigen mejores servicios públicos y una sociedad más justa e igualitaria. Goldfajn explicó que existe la sensación de que el crecimiento está estancado. Una nueva “década perdida” de crecimiento económico insignificante, similar a lo que experimentó la región en la década de 1980, es una posible amenaza, y los ciudadanos han expresado abiertamente sus preocupaciones.
Establecer un conjunto de prioridades es clave para el BID. Goldfajn explicó que el desarrollo social es su máxima prioridad, seguido del desarrollo de infraestructura y los proyectos de adaptación y mitigación climática. El mandato central del banco para abordar cuestiones sociales, como la salud y la educación, será el marco rector de esta estrategia.
“Entré al banco diciendo que si todo es prioridad, perderemos el foco. Por eso necesitamos establecer prioridades y estamos trabajando en una estrategia para los próximos cinco años. Tendremos que tomar decisiones”. -Ilan Goldfajn
Atraer al sector privado
“Hay que repensar el papel de las organizaciones multilaterales para proporcionar bienes públicos globales y no solo bienes nacionales, que es para lo que fuimos creados originalmente”. -Ilan Goldfajn
Esta estrategia de priorización también requerirá una reinvención del rol tradicional de instituciones como el BID. Las asociaciones público-privadas (APP) son un ejemplo de las iniciativas que el banco puede apoyar. Tanto Goldfajn como Werner coincidieron en que catalizar las inversiones del sector privado debe ser una prioridad para promover el desarrollo regional.
“Cuando trabajaba en el gobierno de México, el BID fue muy útil para ayudarnos a establecer la ley que permitía las APP, lo que trajo un aumento de las inversiones. Ahora esto se ha convertido en una práctica frecuente en América Latina”. -Alejandro Werner
Democracia en la Región
Goldfajn también explicó que el BID debe asegurarse de que los países que se benefician de los préstamos actúen de acuerdo con los valores fundamentales del Banco, aunque esto puede reducir la agilidad institucional. El BID, argumentó, debe ser ágil y firme en la defensa de sus valores.
“Necesitamos promover instituciones que busquen la cooperación y la moderación. Espero ser un líder que promueva conversaciones y puentes entre países, intereses y voces”. -Ilan Goldfajn
Goldfajn concluyó enfatizando la importancia de las alianzas del Banco con instituciones clave, señalando la colaboración entre el BID Lab, el laboratorio de innovación del Banco y la Universidad de Georgetown como un ejemplo de sinergia productiva.
Una grabación completa del evento está disponible en el canal de YouTube de GAI.