Ministro de Hacienda de Paraguay, Carlos Fernández, aborda desafíos y oportunidades para la economía del país
El 19 de abril de 2024, el Georgetown Americas Institute recibió a Carlos Fernández, ministro de Finanzas de Paraguay, para una discusión sobre los temas más apremiantes que enfrenta la economía del país en la actualidad. La conversación fue moderada por Alejandro Werner, director fundador de GAI.
Paraguay se erige como la octava economía más grande de América Latina y el Caribe. Durante las últimas dos décadas, el país, cuyas exportaciones se centran en la agricultura, la ganadería y la energía hidroeléctrica, ha logrado avances significativos en la reducción de la pobreza. Sin embargo, persisten algunos problemas sociales, como la insuficiente inversión en infraestructura pública, las altas tasas de desempleo juvenil, las altas tasas de informalidad laboral y la alta vulnerabilidad a los efectos del cambio climático. Fernández abordó estos temas y más en una discusión con estudiantes y profesores de Georgetown.
Dos décadas de crecimiento y estabilidad
Fernández destacó la historia positiva de crecimiento económico que ha caracterizado al país durante los últimos 20 años. En 2002, el país tenía una relación deuda/PIB del 60%, una tasa de pobreza del 50%, una inflación de dos dígitos y una tasa de depreciación anual del 30%. Hoy, el país ha mejorado significativamente, con una relación deuda/PIB del 36%, una moneda estable y una tasa de inflación del 3,2%. Los indicadores sociales también han mejorado en todos los ámbitos; el país experimentó una reducción de la pobreza total del 2,7% entre 2022 y 2023, cayendo al 22%.
Fernández explicó que debido a que la sociedad paraguaya ha abrazado la estabilidad macroeconómica como un bien público, en 2024 el país estará experimentando el desempeño de crecimiento más sólido de todos los países latinoamericanos. Sin embargo, también señaló que bajo el presidente Santiago Peña, la actual administración pretende no sólo mantener buenas calificaciones crediticias, sino también garantizar que el público paraguayo tenga éxito, especialmente aquellos en situaciones económicas y sociales frágiles.
Fernández destacó que para mantener el crecimiento el gobierno debe centrarse en fortalecer el capital humano. La administración se centra en los jóvenes del país que ingresarán al mercado laboral durante la próxima década. En ese contexto, el gobierno ha lanzado un nuevo programa, financiado con transferencias de la central hidroeléctrica estatal, para proporcionar desayuno, almuerzo y merienda gratuitos a todos los estudiantes paraguayos. Este es un esfuerzo que el gobierno está haciendo para asegurar el capital humano en la futura fuerza laboral.
Superando las restricciones pandémicas
El ministro explicó que la prioridad del Presidente Peña es recuperar el espacio fiscal y monetario utilizado durante la pandemia de COVID-19 para enfocarse en cuatro áreas: salud, educación, seguridad y red de protección social. Ahora que el país ha abordado las necesidades más urgentes de la pandemia y los períodos pospandémicos, el equipo de Fernández ahora puede trabajar para abordar las necesidades de mediano plazo, como implementar los cambios estructurales necesarios en la economía. Fernández expresó que si bien el sector público será útil en este objetivo, sólo se lograrán tasas de crecimiento sostenibles con la participación del sector privado.
Seguridad alimentaria y crecimiento verde
Paraguay tiene un suelo rico y fértil que produce una producción agrícola significativa. Debido a esto, están contribuyendo a los esfuerzos para combatir la inseguridad alimentaria, que se ha vuelto cada vez más importante en medio de la invasión rusa de Ucrania. Sin embargo, según Fernández, el país quiere ser conocido por algo más que la agricultura.
Paraguay planea diversificar su economía y utilizar más eficazmente sus activos. El país se ve a sí mismo como un centro potencial para el crecimiento verde debido a sus importantes fuentes de energía hidroeléctrica. Itaipú, la segunda represa hidroeléctrica más grande del mundo, es un gran productor de energía limpia y renovable, lo que permite al país producir de manera sostenible el 100% de sus propias necesidades eléctricas.
El ministro describió la estrategia “Paraguay Verde”, que es un esfuerzo por convertir al país en un ejemplo de crecimiento económico sostenible, fuerte y verde. Como ejemplo, señaló un nuevo plan para utilizar hidrógeno verde para crear fertilizantes verdes, lo que fortalecería el papel de Paraguay para garantizar la seguridad alimentaria en América Latina y el Caribe. Las inversiones ya han comenzado y una empresa británica, ATOME, ha prometido 400 millones de dólares.
"Tenemos agua, tenemos energía... y con la combinación de eso podemos hacer algo llamado hidrógeno verde". - Carlos Fernandez
Los sustitutos de los combustibles son otra parte importante de este proyecto, ya que las inversiones en biocombustibles ya han comenzado. Es un camino natural a explorar para el país, ya que ya produce las materias primas necesarias para los biocombustibles en su sector agrícola, lo que le otorga una ventaja competitiva. El gobierno también está ayudando al sector privado en este nuevo esfuerzo, ya que recientemente aumentó la combinación obligatoria entre biocombustibles y combustibles regulares del 3% al 5%. El ministro compartió que en las próximas semanas el gobierno emitirá un nuevo decreto que aumentará el nivel máximo de mezcla al 12%.
Mercosur y el régimen maquilador
Paraguay se encuentra en un vecindario difícil y plagado de desafíos políticos y económicos. Aunque este ha sido históricamente el caso, el ministro señaló que en años más recientes Paraguay y sus vecinos han estado trabajando para lograr una mayor colaboración, inspirados por el éxito del bloque comercial Mercosur.
Fernández aseveró que una de las mayores ventajas del Mercosur para Paraguay es el régimen de maquila, que es una ley de zona franca que permite a los inversionistas importar bienes para ser procesados, reparados o ensamblados dentro del país antes de exportarlos con un producto “Hecho en Paraguay”. /Mercosur”. El régimen se introdujo a principios de la década de 2000, pero no se adoptó ampliamente hasta mediados de la década de 2010. Ahora, las exportaciones totales de este sector representan el 8% de las exportaciones totales de Paraguay (1.200 millones de dólares al año), generando alrededor de 25.000 puestos de trabajo.
A través del régimen de maquila, el Mercosur le ha dado al país acceso a Brasil, un mercado de más de 200 millones de personas. Los inversores brasileños ahora vienen a Paraguay y crean empleos de calidad para los paraguayos. El ministro calificó la relación como beneficiosa para todos, ya que fortalece los mercados laborales y de consumo de Paraguay, permitiendo al país de 7 millones de ciudadanos acceder a un bloque comercial con más de 300 millones de habitantes.
Durante la parte de preguntas y respuestas del evento, los estudiantes hicieron preguntas sobre los indicadores sociales del país, a lo que Fernández respondió reconociendo el impacto regresivo y amplio de la inflación en las clases medias y bajas y señalando que el Banco Central ha estado actuando para controlar la inflación.